jueves, 5 de enero de 2017

Idealizaciones

Ten cuidado de las idealizaciones: las idealizaciones son peligrosas y constituyen una de las trampas más perniciosas que nos puede tender nuestra racionalidad.

Creo que es casi lugar común afirmar que cuando una persona se enamora de otra, en realidad se está enamorando de la idea que tiene de ese otro; así que ese es el concepto: una cosa es la realidad y otra cosa la idea, positiva o negativa, que cada quién se hace de esa realidad.

Podemos idealizar personas, momentos, sabores, experiencias, rituales, manifestaciones artísticas y culturales de todo tipo y, por supuesto, ideas. Hace poco tiempo me sorprendí pensando en una persona y las particulares cualidades que, en mi mente, hasta ese momento le acompañaban, cuando caí en la cuenta de que la mayoría de sus "virtudes" no eran más que particularidades que yo había idealizado al grado de sentirlas como rasgos de genialidad, y es que así opera nuestra mente, que nos pone trampas y efectos especiales para que privilegiemos unas experiencias por encima de otras.

Una de las mejores muestras de este juego mental me lo proporcionó un exalumno de secundaria que, siendo mi alumno en segundo grado, se refería a su noviecita como la cúspide de las cualidades humanas y femeninas hechas persona. Tiempo después, cuando él estaba en tercero, lo encontré en el patio de la escuela, y al cuestionarlo por su adorada de antaño, se limitó a decir "Neeehhh... ni está tan chida". Muestra de que incluso el amor más intenso está movido por idealizaciones de carácter pasajero.

Más perniciosas son las idealizaciones ideológicas, donde las personas tienden a casarse con una línea específica de pensamiento o con el representante de esa ideología. A mí todavía me sorprende la cantidad de personas que defienden a AMLO ponderando sus muchas acciones a favor del país, aunque en los últimos 18 años se ha dedicado sólo a criticar y a prometer que cuando él sea presidente todo será mejor, sin tomarse la molestía de explicar cómo lo haría. En realidad no ha hecho nada por el país, más que salir en la tele criticando al presidente en turno.

¿O qué me dices de los defensores de Nietzsche, Marx, Freud o Foucault?, por mencionar algunos. Ellos toman los dichos y escritos de sus guías ideológicos como palabra sagrada. Y no es que me desagrade o esté en contra de lo que han dejado dicho, sino que asumo que siempre hay la posibilidad de que algunas de sus ideas no sean válidad; por el simple hecho de que son humanos atados a sus propias circunstancias y contextos.

Sin embargo, los efectos más demoledores de la idealización giran en torno a la que se hace de las personas. Es la más peligrosa, y sin embargo, la más disfrutable.

Aunque no sea verdad.

sábado, 6 de agosto de 2016

Revistas

Tengo tantas revistas que con frecuencia tengo de deshacerme de ellas en forma masiva. Así ha ocurrido con miles (de verdad, miles) de cómics que por décadas he ido acumulando ("coleccionando", suelo decir) para después terminar vendiéndolos o regalándolos cuando ya no tengo dónde ponerlos. Así me despedí de mis colecciones de Spiderman, Daredevil, Cuatro Fantásticos, Vengadores, Spiderwoman, Ms. Marvel y X-men, que fueron los primeros cómics que abandoné, es decir que dejé de comprarlos y conservarlos. Eso fue hace unos 25 años, y junto con ellos se fueron mis revistas de Mortadelo y Filemón, Los cuates Zipi-Zape, Clásicos ilustrados, Vampirela, Chanoc, Robocop, varios de Simón Simonazo que aún conservaba, Heavy Metal, Hulk, seguramente muchos más que ahora no recuerdo.

Seguí comprando y conservando los cómics de Batman, Superman y Liga de la Justicia, pero 10 años después también les tocó su turno para salir de mis hábitos y espacios de almacenamiento. Aunque después he leído ocasionalmente algunos arcos (así llaman a las historias que abarcan varios números y, en ocasiones, diferentes títulos), pero principalmente de manera digital, y de aquella ocasión preservé algunos ejemplares que me parecieron sobresalientes: La muerte de Superman, Una muerte en la familia, la serie Hush, dibujada por Jim lee, El regreso del caballero nocturno, una colección completa de Conan, realizada por las mejores plumas de la historia del cómic, y varios ejemplares por el estilo. En total, cinco cajas de archivo llenas de cómics. En estos días he estado haciendo nuevamente una purga de almacenaje, y de las cinco cajas sólo queda una y media *suspiro*.

Yendo un poco atrás, en septiembre de 1984, cuando me dirigía en autobús al que sería mi primer empleo como maestro de primaria en una escuela de Dr. Arroyo, hicimos una parada en un lugar llamado San Rafael, que en ese tiempo era, además de restaurante y tienda de sourvenirs, revistería. En aquel lugar compré el número uno de la revista Muy Interesante, la cual desde entonces he venido comprando y coleccionando. Lamentablemente perdí varios de los números de los primeros diez años en un incidente de plomería que mojó la caja donde estaban guardados. Con esa salvedad, la mayoría de los números que se han publicado en estos más de 30 años, incluyendo muchos especiales, están ocupando un enorme espacio de mis estanteros.

Como me niego a venderlos o regalarlos, los estoy emplayando para almacenarlos y tener nuevamente oportunidad de ojearlos en alguna ocasión.

domingo, 10 de abril de 2016

Abejas

Tengo dos perras. Una blanca y una negra. Son las dueñas y señoras de patio, pasillos y terraza de mi casa. Como buenas amas y señoras caninas, cumplen con su sacrosanta misión de llenar todo de caca. A uno le toca limpiar.

Hoy, mientras realizaba el aseo del patio, encontré, al igual que en la terraza, una gran cantidad de abejas muertas, conté al menos veinte, incluyendo dos que cayeron mientras limpiaba. No uso insecticidas, pesticidas ni cosas por el estilo. Asumo que así como cayeron en mi casa, hay abejas muertas por todo el barrio.

La pregunta es: ¿qué está matando a las abejas?

No tengo respuestas ni me nace construir explicaciones. Simplemente estoy preocupado porque no es bueno que las abejas vayan  cayendo muertas por ahí.

jueves, 1 de octubre de 2015

Estaban Jesús y sus doce apóstoles jugando a la lotería.
Pero Judas perdió todo, ya no tenía qué apostar.
La jugada era de a peso, y Judas pensó: "Voy a hacer como que pongo, pero sólo haré ruido con las monedas"
Así lo hizo.
Pero Tomás, que era muy desconfiado, contó el dinero y dijo: "Sólo hay doce pesos, alguien no puso", a lo que Judas reaccionó rápidamente, agarrando un peso y diciendo: " Ah, no. Yo con tramposos no juego, denme mi peso".

Ese es López Obrador con lo de Ayotzinapan.

sábado, 5 de septiembre de 2015

Eso

Yo nunca había leído nada de Stephen King.

Sé que la película "El resplandor" está basada en una de sus novelas, e ignoro cuáles otras de las películas o programas que he visto son adaptaciones de sus escritos; pero el hecho es que nunca me había interesado por leer nada suyo.

Hasta ahora.

Y resulta que me gustó. Leí "Eso", que me pareció amena y ligera. Poco tenebrosa, en realidad, pero amena. Supongo que, de haberla leído hace 30 años, muchos de sus pasajes me habrían hecho perder el sueño o la tranquilidad; pero cuando ya rebasas la media centuria, es difícil que la posibilidad de un payaso diabólico te impresione (otros son mis demonios: la hipertensión, el colesterol y la seguridad social).

Tan pronto como la terminé (lo que en un principio me pareció remoto, dado el volumen de páginas que tiene el libro) se las recomendé a mis alumnos de secundaria.

Sé que ellos, si se animan a leerla, se asustarán y lo disfrutarán; porque así son los muchachos de hoy: buscan emociones fuertes, y yo prefiero que esas emociones sean de origen intelectual.

Entonces: la recomiendo.

sábado, 3 de enero de 2015

Hoy terminé de leer el segundo libro de la serie "Los reyes malditos", de Maurice Druon. La verdad es que nunca me habría interesado en esta serie, de no ser porque me enganché con los libros de R. R. Martin, de la serie "Canción de fuego y hielo", sí, esos de donde salió la serie Juego de tronos. Cuando terminé con el último libro publicado hasta ahora de la saga (así les dicen ahora), me puse en plan de fangirl desesperada a buscar todo lo que pudiera encontrar sobre los libros, y me hallé con unas declaraciones de Martin en que confesaba que su inspiración habían sido los libros de Druon.

Volviendo a los reyes malditos. Se trata de buenas narraciones, simples y sin complicaciones, sin tramas ocultas y sin sorpresas; no hay arrebatos literarios ni aspiraciones intelectualoides que obstaculicen la lectura. Es una buena reinterpretación de los acontecimientos históricos que rodearon al rey Felipe el Hermoso y a sus descendencia; debo agregar que se trata, además de una excelente oportunidad para conocer un poco más de historia y cultura medieval europea.

Ya comencé el tercer libro, que promete ser igual de ligero que los anteriores.

Y de recomendarlos, claro que los recomiendo.

viernes, 2 de enero de 2015

Nuevo año

Comienza un nuevo año; para mí, con una intención muy concreta: escribir. He pasado los últimos años (quisiera decir que meses, pero han sido años), en el inaceptable pasmo que me provocaron un conjunto de eventos y ciscunstancias personales que, injustificadamente, tal vez, me alejaron de la sana páctica de la escritura cotidiana.
Me planteo hoy, en pleno cierre de un periodo vacacional, rescatar la escritura como práctica permanenente; y me propongo realizarla en las dos vertientes que me son más familiares: la del ensayo académico y la de la reflexión personal (lo de la narrativa literaria y la poesía no se me da para nada).
Así pues, me doy yo mismo la bienvenida y mi escéptico deseo que de mis propósitos se vean compensados de manera eficiente por mi voluntad.

Hay vida: ¡Salud!