viernes, 6 de marzo de 2009

En más de 10 años escribiendo para publicar en Internet, nunca se me había ocurrido incluir un contador o herramienta similar en mis páginas, pues he sido fiel al principio de que uno escribe y el que quiere lee. Es decir que, salvo contadas ocasiones en que las circunstancias lo han demandado, no trato de convertir mis páginas en un medio de propaganda o de adoctrinamiento (lo hice solamente en relación con la Reforma en Secundaria de 2006, cuando tuve acceso a documentos preliminares que me permití difundir para su conocimiento y discusión en los foros que consideré adecuados; claro que se trató de una decisión personal).

Resulta que la semana pasada se me ocurrió insertar uno de esos contadores en la página de mis Notas, aunque lo hice de forma invisible, y encontré una gran cantidad de herramientas complementarias muy interesantes. Sigo sin saber quienes me visitan (y es algo que no me interesa saber, pues podría influir en mi forma de expresar las ideas y juicios; de hecho, hay gente que declara expresamente que no pierde el tiempo en leer "esas cosas", y es algo que me llena de alivio, pues no me aligera de la tensión de serles grato, o al menos amable), pero en cambio recibo información como cuál es la página desde la cual llegaron a la mía, y resulta que el blog de Lucy es el que más visitantes me proporciona. También hay gente que llega desde google buscando el nombre de mi blog, por lo que supongo que son personas que me conocen pero no tienen registrada la dirección de mi blog.

También me he enterado de que el 60% de mis visitantes son de Monterrey y su área metropolitana, y del 40 restante, la mitad corresponde a otros lugares del país, y el resto a otros países, especialmente Venezuela y Colombia, aunque también tengo visitantes de España, Brasil, Guatemala, Estados Unidos, y varios más.

Lo más interesante de todo es que al menos un 30% de mis visitantes llegan gracias a las búsquedas en google en relación con temas de gramática y de educación, y después comienzan a leer el resto de las páginas y a visitar algunas de las ligas que incluyo en mi sitio. De todos los temas que manejo, el que más visitas me proporciona es el referido a la paráfrasis y la perífrasis, que en una semana me ha reportado más de 45 visitantes de distintas partes del mundo, especialmente de América del Sur. Esta situación me ha obligado a revisar y hacer correcciones al tema correspondiente, pues me involucra en la responsabilidad de cuidar la calidad de la información que proporciono.

De repente me siento como editor de aquellas revistas "pornográficas" (nunca presentaban desnudos totales) de los años 70 que llegaron a ser consideradas peligrosas por las autoridades del país, dada la extraña, pero seductora, mezcla de sexo y crítica política.

El problema es que contar con esa información constituye un tipo de compromiso que no deseo mantener, por lo probablemente quitaré el contador mencionado, y seguiré diciendo mis barrabasadas desde la más plácida de las ignorancias.

1 comentario:

  1. Hola profe, yo soy una de ellas, no creo que eso cambie su manera de escribir, así que...

    Saludines

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